No puedo recordarte, sin que una sonrisa se esbocé en mi rostro. Puedo decir que solo tengo buenos recuerdos, de una infancia compartida a ratos en las vacaciones , de verte a ti y a javi como los primos grandes, de ser testigo cómplice de sus coqueteos con las niñas de su edad y de compartir juegos y risas en los paseos al rio y la finca, y los recuerdos de mi mamá cuando eras mas pequeño y le contabas tus historias acerca de Riomancio. Siempre voy a recordarte con ese dulce gesto que siempre tenias cuando nos volvíamos a ver y esa sonrisa que se extendía hasta la comisura de tus ojos y formaba esa características patas de gallina de la familia, la mismas del tío Álvaro, y ese dulce saludo Dianita!! siempre en diminutivo porque para ti parecía que yo nunca hubiera crecido. No olvidare la descripción detallada de la felicidad que te dio el nacimiento de tu hija y las sabias palabras que pudimos compartir hace poco. Fuiste y eres un dulce regalo que nos dio el Señor para los que pudimos compartir así fuera breves espacios de tu vida .Gracias Primis